Halloween y Día de Muertos: fiestas y rituales para celebrarlo
31 de octubre - Halloween:
Se trata de un momento idóneo para reverenciar a los ancestros, y para abrir canales con otros mundos. De esta manera se realizan rituales.
Baño de purificación a las 12 de la noche
Existe una “hora de las brujas”, es a las 3 am cuando las criaturas sobrenaturales se despiertan y se realizan hechizos. Como Halloween en una noche en la que brujas y brujos hacen conjuros, algunos recomiendan bañarse a las doce de la noche, como ritual de purificación, con agua caliente, sal, unas gotas de vinagre, hojas de laurel o lavanda. Tenemos el recipiente preparado y lo echamos sobre el cuerpo antes de salir de la ducha. Mientras el agua va corriendo, nos vamos despojando de la oscuridad y vamos llevando luz a cada uno de los chakras del cuerpo,. El objetivo es limpiarlos y que se vuelvan luminosos este nuevo año mágico que comienza.
En los días previos, se comienzan a organizar por grupos familiares y de amigos para desembocar con todo preparado, a efectos de esperar a las almas de los seres queridos y homenajearlos con aquellas cosas que a ellos, en esta vida les agradaban.
Los colores del mantel de la mesa de ofrendas son distintos si el alma es de una persona grande (negro) o un niño (blanco).
También existen diferencias en la conmemoración según el aniversario de partida. El primer año, la reunión es muy seria y refleja tristeza. El segundo más alegre y en el tercero, se lo despide con alegría.
- Día de todos los Santos y Muertos
Por todo ello, un primer ritual será plantar un tubérculo o un bulbo; unos lirios, o incluso un arbolito y ofrecerlo a la Madre Tierra, como símbolo de agradecimiento por todo lo que nos da en tiempos de cosecha y por todo lo que recibimos de ella, protección y
Otro ceremonia posible es buscar rincón tranquilo y silencioso de la casa encender una vela del color..
El tercer ritual podrías hacerlo preferentemente el día 12 de noviembre. Con una foto de un ser querido fallecido, tomarla y agradecer todo lo que hizo por nosotros.
Pueden ser panes con formas de animales (palomitas, perros, llamas víboras, gatos) personas (angelitos, niños,) y lugar especial tienen “los turcos”, que son figuras humanas realizadas como pan, pero pintadas de negro, u objetos (escaleras, sillas, cruces) que representan algo muy caro a los sentimientos de las almas a las cuales están esperando.
También se realizan bebidas como chicha de maíz, maní, vino, cerveza, agua mineral y comidas que eran del agrado del “difunto”, como una manera de decirle que lo recuerdan con amor y esperan su visita. Como vemos, hasta aquí, todos los quehaceres se realizan “en comunidad y dentro de las casas”.
En algunos lugares se colocan mesas simulando un altar. Se decora con un mantel negro (luto) que cubre la totalidad de las mesas, y en lo posible, llega hasta el piso y por encima de las mesas, es decir que una parte del mantel va suspendida con clavo. Esto representa el cielo (es especialmente para las almas nuevas).
Las comidas se terminan de preparar el 1° de noviembre al mediodía. Puede ser distintos guisos, mote, choclos, y todas aquellas comidas que eran del gusto de “la almita” que están esperando. Así mismo, entre las bebidas se encuentra chicha de maíz, de maní, vino, alcohol, cerveza, gaseosas, agua
Y entonces llega el momento más importante del ritual: la vigilia, esperan toda la noche a las almas, recordando etapas de su vida, chistes, alegrías, penas, se cuentan anécdotas alegres, situaciones bellas, etc. Y llega el momento entonces de servir primero, a los que ayudaron, a los parientes y amigos, las comidas y todas las ofrendas que se realizaron, y luego, a los que comienzan a llegar para acompañar a los familiares y amigos.
El 2 de noviembre, luego de comer y beber, es el momento de salir de las casas y visitar el cementerio para llevar las flores y coronas, que fueron realizadas a ese efecto, con diversas formas, colores y tamaños. Algunos también llevan parte de las comidas para convidar a los presentes en el “campo santo”, sin distinguir si son amigos o parientes. Es momento de compartir.
Y así llega el último momento; regreso a las casas, se deben levantar las ofrendas y los presentes en general llevan una bolsa o canasta para llevarse a su casa comidas dulces, saladas, golosinas, para comer después de haber terminado los guisos, palomitas y haber bebido todo lo preparado.
Es importante destacar que éste ritual es uno de los más antiguos registrado como práctica de los pueblos originarios.
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F: Alejandro Parapsicologo